Causas  

El Genu varum es una condición común en bebés y en niños pequeños que tiende a desaparecer sin tratamiento cuando se cumplen los 3 a 4 años de edad, no obstante, algunos adultos lo presentan por genética, falta de corrección natural durante la infancia o en asociación a las siguientes enfermedades:

 - Artritis de rodilla, o desgaste del cartílago de la articulación. 
 - Tumores óseos e infecciones óseas (osteomielitis) 
 - Fracturas o huesos rotos que no curan bien 

 La enfermedad de Blount: trastorno del crecimiento óseo en el que la parte inferior de la tibia se arquea hacia fuera. 

Cabe añadir que la acumulación de algunos químicos en los primeros años de vida – tales como el fluoruro y el plomo- debilitan los huesos y la salud en general, afectando la curvatura de tu tibia y fémur. 

Signos y síntomas en adultos 

Si tienes piernas arqueadas seguramente notas una curvatura exagerada y hacia fuera de tus rodillas, mientras que tus pies y tobillos se tocan entre sí (ver foto 1). Es común que el Geno varo provoque un rápido desgaste de la suela de tus zapatos, ya que los pies intentan mantener el equilibrio como pueden. De igual modo, es frecuente que tropieces al andar. Conviene señalar que el problema principal de este padecimiento no es la estética, sino el dolor crónico desde las rodillas hasta los pies en estados más avanzados.

¿Cómo corregir las piernas arqueadas en adultos?  

Aunque las plantillas y los zapatos ortopédicos minimizan las molestias asociadas a las piernas arqueadas, los casos graves ameritan de una intervención quirúrgica conocida como osteotomía. Si la rótula está desalineada o afectada por artritis, se corta la tibia, de tal manera que disminuye la presión en la articulación de la rodilla (osteotomía tibial valguizante)